miércoles, 13 de mayo de 2015

A QUIEN MADRUGA, DIOS LE AYUDA

Mientras el cuerpo (la rodilla en este caso) aguante, ahí estaremos, escapándonos a cualquier hora para pisar un poco de monte, que es lo que nos gusta.

Así que el sábado pasado, hicimos una sesión matutina de trail por la sierra de las Quilamas, saliendo desde San Miguel de Valero.
Como madrugamos mucho, yo tuve la sensación de que había sido corta, pero al final nos salieron unos 26 km, así que muy bien.

La ruta en principio bajaba hasta Valero, y desde ahí seguía el GR 188 hasta San Esteban de la Sierra.

La senda estaba muy tapada por la vegetación, así que otra vez que nos vinimos para casa magullados, pero bueno, si no nos gustara, no lo haríamos, así que, no vale quejarse.

Una vez en San Esteban de la Sierra hicimos parte del recorrido de la carrera que, allá por Noviembre, tan mal me salió y que terminó de rematar mi maltrecho ligamento cruzado.
A mitad del recorrido de "Los Lagares" nos dimos la vuelta, porque se nos había hecho un poco tarde y Perrino tenía que estar de vuelta en Salamanca a la hora de comer.

Como digo, al final, fue una buena mañana de km y alegría. ¡¡Y de calor!!

Después de unas buenas y fresquitas cañas, absolutamente necesarias para mantener el PH de nuestro organismo, fuimos a la Alberca, y terminamos el fin de semana de casa rural en Hondura.




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