LA CABRA TIRA AL MONTE

Mañana campestre en en IX Cross de Cebreros.
Unos decían que este año había bastante menos corredores que otros años, pero la verdad es que había buen ambiente.

Prueba indispensable en el calendario. La carrera en la que más he disfrutado en mi vida. Un circuito de 22 km por pista, senderos y montaña no excesivamente exigentes pero con la irremediablmente dureza inherente a la montaña.

Este año, me ha costado un poquito más. Me faltó la inocencia de la primera vez, la curiosidad, la admiración del paisaje, la incertidumbre...Esta vez ya todo era conocido, y eso hizo que mentalmente me fuera temiendo las cuestas en lugar de afrontarlas con alegría.
Durante prácticamente toda la carrera fui incómoda. Veía impotente cómo me pasaban corredores y más corredores, tanto en subidas como en bajadas. Tan sólo recuperaba alguna posición en los avituallamientos, a fuerza de pasármelos de largo.
A partir de la mitad de la carrera me "asenté" un poco y troté mucho mejor. Las bajadas las hice con mucha más seguridad que el año pasado (tanto me confié que, en un descuido, me vi dando vueltas como una croqueta), aún tengo mucho que mejorar. Las subidas, tengo que entrenarlas más. Tengo que adquirir más fuerza si quiero progresar.
Sin embargo, y ahora, a toro pasado, la verdad es que me vuelve a quedar un dulcísimo sabor de boca.
En ningún sitio como en el monte me siento verdaderamente feliz. Da igual que vaya sola o acompañada, que haga sol o esté nublado, que sea la suave sierra de Ávila o las impresionantes moles de los Alpes.

El aire libre es lo que me da la vida.

Total, que al final, el crono marcaba cinco minutos menos que el año pasado, así que aunque las sensaciones eran infinitamente peores, la mejoría fue evidente, así que contenta.

Mis compañeros de aventura también hicieron muy buena carrera.

Andrés porque no le detiene ni un partido de fútbol apenas 15 horas antes de la carrera,

y Perrino porque se toma las cosas muy en serio y ha entrenado mucho y ahora recoge los frutos.

Un regalito sonoro para amenizar la crónica: