viernes, 12 de septiembre de 2008

WITH A LITTLE HELP FROM MY FRIENDS

Cuando, en ocasiones, siento que he perdio las raíces, que me he dejado llevar por las corrientes que han pasado por mi vida, hasta desembocar en una orilla completamente ajena a mí, lejos de mi tierra, de mi hogar, de mi gente...miro fotos como esta:



y siento un ligero alivio.

Y pienso que quizás así es como tenía que ser, que cada uno hemos derivado en lo que hemos elegido, y el resultado ha sido que ahora, años después, estamos a millas de distancia.




Estas ideas me asaltan, normalmente en momentos de bajón, para terminar de minar mi moral, y dejarme días y días sumida en el reconcome de lo que debí hacer y no hice, en lo que debí decir y no dije, en lo que debí omitir y magnifiqué.




Es un hecho.


Como decía la Celestina: "no vale la pena llorar por algo que no solicionará las lágrimas"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso. Es tuyo o lo ha escrito alguien? Imagino que la de la derecha de la foto eres tu, pero la otra? Me gusta mucho la foto, pero despeja mis dudas, anda

HELENA dijo...

Hola Buuuurrrr!!! Es Susana. Estamos en Lanzarote...