miércoles, 15 de abril de 2009

SEMANA SANTA 2009 (parte 1): MONTAÑA

Día 5: ASCENSIÓN AL ESPIGÜETE (Cara Norte)

Salimos de salamanca a las 6:00 de la mañana para ponernos en Camporredondo de Alba a las 9.00, cafetito y al aparcamiento de Cardaño de Abajo. Serían las 9.30 cuando dejamos atrás los coches y nos pusimos en camino.


El tiempo no auguraba nada bueno, pero tal y como está este fenómeno últimamente, y dado que ya habíamos llegado hasta allí, decidimos tirar pa'rriba hasta donde la niebla nos lo perimitiera, así que, ale! a estrenar las botas nuevas.


La primera parte era un caminito agradable y sin apenas nieve, que servía de acercamiento a esta gran mole de piedra y nieve que desde el principio se intuía complicada.




Una vez que dejamos atrás el cómodo camino y nos calzamos los crampones, comenzaba una subida que no daría tregua alguna hasta la cima.



Sin prisa, pero sin pausa, y preguntando a todo el que nos encontrábamos por el camino cómo estaba la cresta, seguimos ascendiendo con muchísimo respeto: respeto a la montaña y al tiempo.



La última parte, con casi cuatro horas a nuestras espaldas, fue sin duda la más dura, pero, ya que habíamos llegado hasta allí, y que la niebla había ido subiendo a nuestro ritmo, ya no había vuelta atrás (aunque eso no era lo que me decía mi sentido común...), así que, un último esfuerzo, y, por fín, LA CIMA. IMPRESIONANTE.



véase el nivel de nieve que había: de la cruz se ve apenas la parte de arriba







Y, pese a todo pronóstico, todo nuestro esfuerzo se vio recompensado y la niebla empezó a dejar paso al sol:




Y nos permitió hacer fotos tan espectaculares como esta:


Sin palabras.

Después de hacer unas fotos, comentar con los otros visitantes experiencias y demás, comenzó la bajada (que se presentaba tan dura o más que la subida).



Pero como el tiempo ahora era soleado, y estabamos muy contentos y satisfechos por haber alcanzado la cumbre, la bajada se hizo amena, entre bromas, culetazos y pruebas de bajada con piolet.


Al fondo nuestra hazaña:

Y por supuesto, una vez en el alojamiento, duchaditos y limpitos, la(s) cervecita(s) de rigor:





Ale! cenita rica y a la cama, que mañana será otro día.


Día 5: ASCENSIÓN A PEÑA PRIETA

Otra vez madrugón para desayunar antes de que el dueño del hostal se fuera a pescar con sus colegas (6.45 A.M.) joeeeeeeeeeee



Otra vez caras de besugos, saludos rutinarios...menos mal que el desayuno ayudó a ponernos en funcionamiento.

La ruta prevista para hoy empezaba en el aparcamiento de Cardaño de arriba, y, bien prontito, ya estábamos allí. Hoy era preciso empezar lo antes posible porque, aunque las predicciones de este tiempo loco-loco daban lluvias, amaneció absolutamente despejado y no era conveniente encontrarnos con la nieve demasiado blanda.

Total, que empezamos caminando por un sendero semejante al del día anterior, pero con más nieve desde el principio, y, poco a poco nos fuimos acercando, al mismo tiempo que el sol iba tomando cada vez más fuerza (imprescindible buena capa de crema):


Y después de esta breve aproximación: SUBIDA A LO PATXI,que nos llevó algo más de una hora. Como había buena huella, se ascendía rápidamente. La sensación era de subir escalones (eso sí, durante más de una hora...)



Y después, crestear hacia el pico TRES PROVINCIAS, que me pareció precioso, y con unas vistas del Espigüete que casi justificaban el palizón de subir hasta allí arriba:




Fotos de rigor:









Y vistazo hacia lo que aún queda:






Pero antes de que nos dieramos cuenta: CIMA DE PEÑA PRIETA:











Bueno, pues una más (desde 2003 con ganas de subir a este pico), y para abajo, que aún nos queda un trecho.

Una vez en el pueblo, despedida de nuestros compañeros, cenita, cervecitas e incluso alguna copita, que ya era hora.
DÍA 6: DESCANSO
Cañas y tapas por Camporredondo de Alba, Velilla del río Carrión y Guardo. Sin más.

DÍA 7: ASCENSIÓN AL PICO MURCIA.




Dormimos en el aparcamiento de Cardaño de Arriba, inicio de la ruta, por lo que empezamos bien prontito a caminar. Este pico tiene una aproximación preciosa:
Parece una de esas montañas que dibujábamos de pequeños.
Sin más dificultad, llegamos hasta la última pala, que era la que tenía una inclinación importante, y la que, debido a problemas físicos y mentales, pudo conmigo, lo que hizo que no llegara hasta la cima, si no que me quedé a unos 500 metros.



No había más que rascar por allí, así que vuelta, unas horas de descanso y cervezas y rumbo a nuestro siguiente destino: PLAYA (parte 2)







3 comentarios:

Rober dijo...

Bueno, bueno, bueno, ... Vaya fin de semana que nos metimos, el lunes estaba reventado. Lo que no me mola es que sólo salgo en 3 fotillos y tan sólo se me aprecia en una de ellas. Cuando te pase mis fotos espero que las publiques :-)
La próxima en Chamonix.

Anónimo dijo...

Joder !! ¿pero hasta ahí arriba subís??? Jarl !! Hijos míos, tened cuidaaaaadoooo... (el síndrome del padre responsable..) jeje. Cómo mola.

Sonia dijo...

Impresionante, las fotos preciosiiiiiiiiiiisimas!pero la verdad que un poco acojonante, no?
A ver si haces la parte 2 (playa), que la estoy esperando